Bougainvillea x buttiana
Buganvilla - Bouganvilla
Generalmente se piensa en la Bougainvillea como una planta de exterior, exótica, trepadora y de preciosas flores. En realidad, lo es; pero existen, también, muchísimas variedades para ser cultivadas en interior.
Dentro de casa necesita una ubicación con mucha luz y algunas horas de sol al día, si no, perderá las hojas y no llegará a florecer.
Todas las plantas del género proceden de Brasil, de otras zonas subtropicales y se generaliza en las costas mediterráneas.
No requiere demasiados cuidados, aunque es sensible al frío, al crecer se hace más resistente.
La Bougainvillea glabra es la más conocida, con sus brácteas de brillante color púrpura, pero existen variedades de brácteas en color blanco, naranja, rojo, etc.
Los tallos y ramas son leñosos y las plantas maduras desarrollan afiladas espinas que conviene manipular con prudencia.
Las delgadas y transparentes brácteas forman ramilletes en las puntas de las espinosas ramas, rodeando las pequeñas florecillas color crema que contrastan con el color verde brillante de las hojas.
Las flores aparecen en primavera y verano, aunque en los lugares con clima cálido florecen prácticamente casi todo el año.
Esta planta necesita indispensablemente situaciones de pleno sol, incluso en los meses más calurosos, en caso contrario no florecerá
Si las raíces han llenado la maceta por completo, la planta debe ser trasplantada; hay que hacerlo a principios de la primavera, utilizando un buen sustrato.
Si ha madurado lo suficiente y ha alcanzado demasiada altura, se tendrá que realizar una poda en profundidad a principios de la primavera.
En esta época de máximo calor, se tiene que regar moderadamente, dos o tres veces a la semana para que el compost esté siempre un poco húmedo.
Sin embargo, hay que procurar que la planta no tenga la base sobre una superficie o plato que retenga el agua y la pueda encharcar, en esta planta es mejor que se tenga un descuido por falta de agua que por exceso.
En invierno se riega sólo cuando el sustrato esté seco. Las temperaturas pueden descender hasta, 7ºC sin dañar las raíces, pero probablemente se le caerán todas las hojas.
En este caso, hay que podar las ramas de forma drástica hasta casi el nivel del suelo.
También se puede cortar las ramas para conseguir un buen tamaño y darle una buena forma a la planta, > que volverá a crecer a mediados de la primavera.
La Boganvilla suele multiplicarse mediante esquejes en cualquier época del año.
Si se coloca en una maceta con un soporte de alambre o de otro material, se controla la forma y el exceso de tamaño de la planta.
De esta manera se podrá disfrutar de la planta sí se sitúa en una terraza o en una ventana (con sol) y ocupando muy poco espacio.
Dentro de casa necesita una ubicación con mucha luz y algunas horas de sol al día, si no, perderá las hojas y no llegará a florecer.
Todas las plantas del género proceden de Brasil, de otras zonas subtropicales y se generaliza en las costas mediterráneas.
No requiere demasiados cuidados, aunque es sensible al frío, al crecer se hace más resistente.
La Bougainvillea glabra es la más conocida, con sus brácteas de brillante color púrpura, pero existen variedades de brácteas en color blanco, naranja, rojo, etc.
Los tallos y ramas son leñosos y las plantas maduras desarrollan afiladas espinas que conviene manipular con prudencia.
Las delgadas y transparentes brácteas forman ramilletes en las puntas de las espinosas ramas, rodeando las pequeñas florecillas color crema que contrastan con el color verde brillante de las hojas.
Las flores aparecen en primavera y verano, aunque en los lugares con clima cálido florecen prácticamente casi todo el año.
Esta planta necesita indispensablemente situaciones de pleno sol, incluso en los meses más calurosos, en caso contrario no florecerá
Si las raíces han llenado la maceta por completo, la planta debe ser trasplantada; hay que hacerlo a principios de la primavera, utilizando un buen sustrato.
Si ha madurado lo suficiente y ha alcanzado demasiada altura, se tendrá que realizar una poda en profundidad a principios de la primavera.
En esta época de máximo calor, se tiene que regar moderadamente, dos o tres veces a la semana para que el compost esté siempre un poco húmedo.
Sin embargo, hay que procurar que la planta no tenga la base sobre una superficie o plato que retenga el agua y la pueda encharcar, en esta planta es mejor que se tenga un descuido por falta de agua que por exceso.
En invierno se riega sólo cuando el sustrato esté seco. Las temperaturas pueden descender hasta, 7ºC sin dañar las raíces, pero probablemente se le caerán todas las hojas.
En este caso, hay que podar las ramas de forma drástica hasta casi el nivel del suelo.
También se puede cortar las ramas para conseguir un buen tamaño y darle una buena forma a la planta, > que volverá a crecer a mediados de la primavera.
La Boganvilla suele multiplicarse mediante esquejes en cualquier época del año.
Si se coloca en una maceta con un soporte de alambre o de otro material, se controla la forma y el exceso de tamaño de la planta.
De esta manera se podrá disfrutar de la planta sí se sitúa en una terraza o en una ventana (con sol) y ocupando muy poco espacio.