Sedum rhodiola - Rhodiola Heterodonta- Sedum heterodontum
Rodiola dentada
La rusticidad de la que hace gala esta planta, es tan valorable como su apariencia ornamental, aun sin encontrarse en periodo de florescencia.
Esta planta de naturaleza perenne y un crecimiento lento, tiene un área de distribución entre Afganistán, La India, Mongolia y China, abarcando una buena zona del Himalaya.
Es decididamente la mejor planta para formar parte de una rocalla de escaso mantenimiento.
En su medio natural tiene que enfrentarse a las duras condiciones de vida que le ofrece el ecosistema de las tierras altas, modeladas por pedregales y laderas rocosas donde prospera, sufriendo importantes cambios de temperatura entre el día y la noche.
Se enfrenta a duras exposiciones del sol, a la falta de agua durante periodos muy prolongados, a un ambiente constantemente seco y a ciclos de fuerte viento.
En este caso, su austero tamaño y la tendencia postrante de sus tallos le ayuda a soportar los embates del viento de gran fuerza propios de esos entornos.
Forma parte de la familia de las Crassulaceae , por lo que este pequeño grupo está muy relacionado con el género Sedum.
Eso y el evidente parecido en su aspecto con el mencionado género hace que se la conozca también con el nombre de Sedum heterodonta.
La semejanza con el Sedum spectabile es ciertamente asombrosa, sin embargo, la analogía se queda sólo en el aspecto externo.
Es en la parte oculta es donde se encuentra las diferenciaciones de ambas plantas: la primera posee una estructura de numerosas raíces que se propalan desde la base, denominadas fibrosas, mientras que la Rhodiola tiene un tallo corto y grueso que hace un papel de provisión de líquido y está justo debajo de la superficie del suelo, de donde surge la parte aérea, se conoce como cáudice.
Las hojas guardan en el tallo una disposición alterna y en espiral, carentes de peciolo, gruesas y carnosas, ovaladas, con las orillas suavemente dentadas y un peculiar color verde azulado.
Las pequeñas flores en forma de estrella y de color rosa, se agrupan densamente en el ápice de los suculentos tallos de color blanquecino, formando redondeadas cabezuelas colgantes vencidas por su propio peso.
El periodo de floración se presenta hacia finales de la primavera y abarca parte del verano.
Necesita en todo momento exposiciones de pleno sol, en situaciones de sombra la planta no es feliz y es muy improbable que florezca. En cuanto a los riegos deben ser escuetos, incluso en verano.
El suelo tiene que notarse seco antes de regar, y después de hacerlo, esperar a que esté seco de nuevo.
No soporta los encharcamientos, en cambio, no sufre en absoluto con la falta de agua.
Prospera en casi todo tipo de suelos siempre que no concentren humedad.
Se propaga mediante semillas, esta es la fórmula más sencilla y con mejores resultados cuando se hace de forma doméstica.
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