Sinonimia: Vinca rosea
Vinca rosa - Catarantus - Pervinca rosa
Vinca major y Vinca minor Ver ➤
Se trata de una planta de pequeño tamaño, compacta y erguida, densamente cubierta de un follaje brillante de carácter perenne.
Es nativa de la isla de Madagascar, en la actualidad es común en muchas regiones tropicales y subtropicales de todo el mundo.
Puede alcanzar un porte de hasta 60 centímetros de alto cuando se cultiva en jardines, llegando a conformar un pequeño arbusto.
En macetas o jardineras no suele sobrepasar los 30 cm de altura. Pertenece a la familia de las Apocynaceae.
Es muy apreciada por su rica floración de alegre colorido y su facilidad de cultivo. Florece desde finales de la primavera hasta la llegada de la estación fría sin interrupción.
Pese a tener una condición perenne, es cultivada frecuentemente como anual en climas fríos, ya que es difícil conservarla durante el invierno.
Pero no existe problema si se mantiene en verano en el exterior y con la llegada del frío se coloca en una zona protegida, ventilada y bien iluminada, florecerá en las demás estaciones.
No obstante pasados unos años se tendrá que renovar porque pierde su belleza y la floración resulta muy escasa. Las hojas son ovadas o elípticas, de color verde brillante, con una nervadura central blanca.
Las flores poseen cinco pétalos abiertos y se encuentran en una buena gama de colores, desde casi todas las tonalidades de rosa, pasando por el color blanco, malva, anaranjado o rojo, y todas con una marca central de color muy intenso.
Requiere de una ubicación soleada, para regiones de veranos demasiado calurosos es mejor que sólo reciba el sol de las primeras horas de la mañana, o bien emplazarla en una situación de semi-sombra.
Como planta de interior habrá que escoger un lugar cerca de una ventana donde le pueda llegar algo de sol, si no recibe la cantidad de sol que necesita se negará a florecer.
Los riegos tienen que ser copiosos en verano, sin que llegue a saturar el compost. En invierno sólo hay que mantener algo húmedo el sustrato.
Durante su periodo de floración hay que abonarla con un fertilizante para plantas de flor cada diez días.
Esta planta ha generado mucho interés científico porque contiene diferentes sustancias muy beneficiosas para diversas dolencias.
Un beneficio muy importante es el uso que hace la industria farmacéutica para emplearla en tratamientos oncológicos.
La propagación mediante esquejes es muy sencilla y enraízan en pocos días, esta tarea es preferible realizarla en primavera.
También se puede propagar por semillas, plantadas al inicio de la primavera.