Aster de China - Reina Margarita - Coronado
Esta herbácea como puede entenderse por su nombre procede de regiones templadas de Asia.
Es una especie de temporada, por lo que acaba su periodo fértil la planta se desecha. Pertenece a la familia de las Asteraceae.
Grupo que comprende géneros muy populares que incluyen los Girasoles, Dalias o los Crisantemos.
La Aster de China es una anual de tamaño pequeño con una floración profusa.
Además de sobresalir por la belleza de sus alegres flores también es de reseñar la facilidad de su cultivo.
Es apropiada para cubrir arriates o macizos en el jardín. Resulta habitual emplearla en jardineras para decorar barandillas de terrazas o balcones, a los que dará un bello toque de color.
Su altura no supera el medio metro, algo bastante típico de este género. Produce hojas triangulares con los bordes ampliamente recortados y de color verde de poca intensidad.
Las flores son grandes cabezuelas solitarias, con la parte central de color amarillo. Se pueden encontrar en su forma simple, doble o semidoble.
Estas últimas con un innumerable y delgados pétalos semejan delicados pompones.
Tanto las floraciones simples o dobles se pueden encontrar en las mismas tonalidades, esto es: rosa, lila, violeta, blanco, azul o violeta.
La época natural de floración se encuentra entre finales del verano hasta la llegada del otoño.
La mejor ubicación se encuentra a pleno sol, algo imprescindible para que florezca con intensidad.
Si la zona donde está cultivada la Aster de China el sol es demasiado intenso, será preferible colocarla en una sombra parcial, al menos en las horas centrales del día.
Requiere de suelos ricos, que se pueden fertilizar empleando un abono de liberación lenta, que durará para toda la temporada de crecimiento.
En cuanto a los riegos deben ser regulares, pero respetando que la tierra no se sature de agua, algo que puede acabar con esta planta.
Lo ideal es que el sustrato esté ligeramente húmedo y no permitir que llegue a secarse totalmente, al menos por un periodo demasiado largo.
Al ser una planta de raíces poco profundas no se debe descuidar la humedad del sustrato en la superficie.
Las enfermedades a las que se puede enfrentar es la infección por hongos debido a la alta humedad o el ataque de algún insecto.
Se encuentra entre una de las especies más sencillas de propagar mediante semillas.
Estas se han de plantar al finalizar las heladas y dependiendo de cuando se desee su floración.
Lo mejor es consultar la etiqueta de las semillas, ahí se indicará los tiempos a tener en cuenta para la plantación.
Las semillas tardarán alrededor de quince días en germinar. Una vez aparezcan las primeras hojas ya estará preparada para plantar en su lugar definitivo.
Es una especie de temporada, por lo que acaba su periodo fértil la planta se desecha. Pertenece a la familia de las Asteraceae.
Grupo que comprende géneros muy populares que incluyen los Girasoles, Dalias o los Crisantemos.
La Aster de China es una anual de tamaño pequeño con una floración profusa.
Además de sobresalir por la belleza de sus alegres flores también es de reseñar la facilidad de su cultivo.
Es apropiada para cubrir arriates o macizos en el jardín. Resulta habitual emplearla en jardineras para decorar barandillas de terrazas o balcones, a los que dará un bello toque de color.
Su altura no supera el medio metro, algo bastante típico de este género. Produce hojas triangulares con los bordes ampliamente recortados y de color verde de poca intensidad.
Las flores son grandes cabezuelas solitarias, con la parte central de color amarillo. Se pueden encontrar en su forma simple, doble o semidoble.
Estas últimas con un innumerable y delgados pétalos semejan delicados pompones.
Tanto las floraciones simples o dobles se pueden encontrar en las mismas tonalidades, esto es: rosa, lila, violeta, blanco, azul o violeta.
La época natural de floración se encuentra entre finales del verano hasta la llegada del otoño.
La mejor ubicación se encuentra a pleno sol, algo imprescindible para que florezca con intensidad.
Si la zona donde está cultivada la Aster de China el sol es demasiado intenso, será preferible colocarla en una sombra parcial, al menos en las horas centrales del día.
Requiere de suelos ricos, que se pueden fertilizar empleando un abono de liberación lenta, que durará para toda la temporada de crecimiento.
En cuanto a los riegos deben ser regulares, pero respetando que la tierra no se sature de agua, algo que puede acabar con esta planta.
Lo ideal es que el sustrato esté ligeramente húmedo y no permitir que llegue a secarse totalmente, al menos por un periodo demasiado largo.
Al ser una planta de raíces poco profundas no se debe descuidar la humedad del sustrato en la superficie.
Las enfermedades a las que se puede enfrentar es la infección por hongos debido a la alta humedad o el ataque de algún insecto.
Se encuentra entre una de las especies más sencillas de propagar mediante semillas.
Estas se han de plantar al finalizar las heladas y dependiendo de cuando se desee su floración.
Lo mejor es consultar la etiqueta de las semillas, ahí se indicará los tiempos a tener en cuenta para la plantación.
Las semillas tardarán alrededor de quince días en germinar. Una vez aparezcan las primeras hojas ya estará preparada para plantar en su lugar definitivo.
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