Aquilegia coccinea - Aquilegia latiuscula - Aquilegia elegans
Ancolia - Aguileña - Colombina - Aquilegia salvaje
Otras especies: Aquilegia caerulea - Aquilegia vulgaris
Es una herbácea perenne, más concretamente subsiste varios años en el mismo lugar; si bien, dura menos que otras plantas de las mismas características.
El género está compuesto por especies que apenas necesitan descripción por ser bien conocidas y que carecen de complicaciones en su cultivo.
Pertenecen a la familia de las Ranunculaceae.
Esta Ancolia es propia de zonas montañosas de América del Norte, donde medra de manera salvaje en terrenos húmedos y frescos.
Muy popular en jardinería, se la emplea para cubrir arriates esencialmente, pero debido a su pequeño tamaño, se acomoda de manera similar a cualquier contenedor siguiendo los mismos requerimientos.
El follaje se concentra en la base de la mata, con hojas lobuladas y divididas, agrupadas en tres elementos.
Las flores tienen forma atrompetada y están formadas por sépalos y pétalos de diferente color, la parte externa de color rojo poco intenso y la parte central amarilla, con largos y numerosos filamentos del mismo color.
En cuanto a la curiosa forma de sus flores cuelgan en el extremo de finos tallos y guardan la misma apariencia que todos los integrantes del grupo, en las que destaca las largas espuelas.
Los tallos no alcanzan más de 50 cm de longitud, son de color rojo burdeos, suavemente peludos y portan en su extremo las solitarias flores.
El tiempo propio de floración se encuentra entre la primavera e inicios del verano.
La reproducción mediante semillas permite plantarlas en diferentes periodos del año, del tal modo que las fases de floración pueden variar.
Con las flores se puede realizar ramos de aspecto campestre, en esta situación sorprende su comportamiento duradero.
Su cultivo no presenta complicaciones y agradece los terrenos permeables y ricos en materia orgánica; el suelo se puede enriquecer al inicio de la temporada o bien agregar un abono líquido regularmente.
Tiene una moderada resistencia al frío, de hecho, en zonas de inviernos rigurosos la planta puede llegar a desaparecer.
No obstante, y debido a que la planta se auto-siembra esparciendo sus semillas en las cercanías, es bastante habitual que al año siguiente vuelva a aparecer.
Origina unas vainas largas y agrupadas que contienen numerosas semillas, hay que dejar que se sequen en la mata antes de recolectarlas.
Si no se desea hacer acopio de semillas, es mejor cortar las flores agostadas, así toda la energía de la planta se centra únicamente en los nuevos brotes.
La siembra de semillas se realiza en cajoneras frías hacia el inicio de la primavera.
Otra opción es hacerlo entre abril o mayo (hemisferio norte) en el exterior y plantadas directamente en el suelo.
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