Trillium grandiflorum 'roseum' - Trillium grandiflorum 'Flore Pleno'
Lirio americano - Lirio de los bosques - Trilliun blanco
Las Trillium obtienen su nombre del latín trillix 'triple', como consecuencia de que casi todos los elementos de la planta están divididos en tres partes.
Son plantas herbáceas rizomatosas, de naturaleza perenne y pequeño volumen. Pertenecen a la familia de las Melanthiaceae, compuesta escasamente por una veintena de géneros.
Las especies que comparten el género Trillium son originarias de las regiones boscosas de América del Norte y Asia.
Resultan muy apropiadas para ubicaciones sombreadas, a ser posible, bajo árboles o plantas altas que dejen pasar mucha luz, imprescindible para que florezcan.
Las plantas cultivadas en regiones de climas suaves, sobre todo de primaveras agradables, pueden permanecer a pleno sol todo el tiempo sin inconvenientes.
A partir de un rizoma subterráneo aparen los tallos erguidos, que en el mes de mayo emiten en su cima las flores de color blanco, los pétalos al igual que los sépalos y las hojas están formados por tres elementos.
Las vigorosas matas están formadas por un grupo de delgados tallos erectos, de no más de 35 - 40 cm de altura, que proporcionan un hermoso espectáculo cuando presentan sus grandes y singulares flores.
Las flores pueden adquirir una tonalidad rosácea con el tiempo, aunque algunas de sus formas son totalmente rosas como la Trillium grandiflorum var. roseum, otras variedades tienen los pétalos blancos con manchas rojas.
La variedad Trillium grandiflorum 'Flore Pleno' exhibe grandes flores dobles de color blanco puro.
En el caso de estas flores guardan un gran parecido a las camelias.
Prefiere disponer de un suelo rico, bien abonado, ligeramente ácido, en el que sus raíces obtengan una suficiente dosis de humedad de manera continua.
Se puede cultivar en contenedores, pero no se da especialmente bien, más que por estar recluida en un tiesto es por las condiciones.
Dado que no siempre se la ubicca en posiciones adecuadas y no suele disponer de la humedad y profundidad que le ofrece el suelo.
Es sabido que estas plantas no soportan las situaciones secas ni calurosas, tampoco los suelos calcáreos, ni pobres.
Hay que prestar especial atención a las babosas y caracoles que suelen atracarla con entusiasmo, dejando claras evidencias de su paso.
Aparte de este molesto padecimiento, suele estar libre de cualquier otra plaga.
Para que las heladas no perjudiquen los rizomas es necesario que antes de llegar el frío se acolche el terreno con paja, corteza de pino o cualquier otro material aislante.
La multiplicación a través de semillas es una tarea compleja que lleva algunos años hasta ver un óptimo resultado.
Es mejor dividir los rizomas a comienzos del otoño para hacerse con nuevos ejemplares.
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