Aglaonema híbrido - Aglaonema de color
El género que representa las Aglaonemas está constituido por plantas herbáceas pequeñas y de hoja perenne.
Todas las especies son originarias del sudeste asiático, desde la India, hasta Filipinas y China.
De manera común las hojas de las Aglaonemas son de color verde, pero los nuevos híbridos ofrecen coloraciones inusuales de formidable belleza.
Estas populares plantas ornamentales de interior, ofrecen un gran número de especies naturales, a las que hay que añadir el sinfín de nuevas plantas que aparecen a menudo como consecuencia de cruces, caso de esta planta.
Proceden de las selvas tropicales, donde la humedad el tremendamente elevada, esta nota hace evidente que son plantas que requieren ambientes muy húmedos.
El sustrato hay que mantenerlo siempre ligeramente húmedo, no empapado, y humidificar el entorno de la planta a menudo, de manera más insistente en época de calor.
De la misma manera que el follaje puede tener una dispar gama de tonalidades rojizas diferentes, también la intensidad puede variar siendo más o menos potente.
En este apartado la intensidad de la luz que reciba juega un papel importante, así los ejemplares que gocen de una viva claridad, evidenciarán unos colores imponentes.
Si la planta recibe la luz exclusivamente de un solo lado, es vital girar la planta un tanto cada cierto tiempo, en caso contrario se escora hacia la luz y crece de modo deficiente.
Son plantas fáciles de cultivar, sólo demandan entornos luminosos y húmedos. No toleran en absoluto el frío.
Por tal motivo no deben ser expuestas a temperaturas inferiores a 10º C y menos aún durante largos periodos.
Las grandes hojas poseen peciolos largos, son ovaladas y de bello colorido; los tallos, bordes de las hojas y el nervio central son de color rosáceo.
Mantener las hojas limpias origina ejemplares lustrosos y saludables.
Es preferible no regar el sustrato ni mojar las hojas con agua demasiado fría, mejor utilizar agua de lluvia a temperatura ambiente o ligeramente atemperada.
Las inflorescencias son características de la familia de las Aráceas, pero en este género son pequeñas y generalmente poco llamativas.
Se componen de un espádice en el que se insertan las flores, cubiertas por una bráctea conocida como espata.
Las flores aparecen fácilmente en las plantas cultivadas en invernadero, pero es más complicado que lo hagan en un medio poco adecuado como es el interior de una vivienda.
Alimentar la planta con un fertilizante líquido para plantas de hoja cada quince días, entre la primavera y final del verano.
Resulta sencillo propagarla a partir de esquejes tomados de las puntas de los tallos.
Los esquejes pueden ser acopiados en cualquier época, pero mantenidos a una temperatura de 21º C en una mezcla porosa y húmeda.
Es frecuente que la planta genere nuevos brotes alrededor del tallo principal, cuando tienen un tamaño manejable se pueden separar de la planta madre.
Hay que intentar que cada brote porte alguna raíz, a continuación se plantan.
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