Sinonimia: Calathea lancifolia - Calatea lancifolia
Al igual que sucede con el resto del grupo es en su hermoso follaje donde se encuentra la razón de cultivarla para que forme parte del ornamento de interior.
Esta es quizás la especie más fácil de cultivar y su follaje el menos propenso al ataque de la araña roja que otras variedades de su mismo género.
Es una planta arbustiva que alcanza hasta 1´5 m de altura en su hábitat natural, pero confinada en una maceta y en interior no sobrepasará los 50c cm.
Sus hermosas hojas son lineales, largamente lanceoladas, con los bordes algo ondulados.
En la superficie superior, a ambos lados del nervio central muestra un diseño compuesto por manchas verdes oscuras irregulares y alternadas, dispuestas siempre una larga y otra corta sobre una base de color verde amarillento.
La superficie inferior de las hojas es de tonalidad violeta roja muy intensa.
Le gusta los ambientes con humedad elevada y una buena iluminación, intensa pero suavemente matizada.
La luz directa del sol quema sus delicadas hojas y una iluminación demasiado potente origina la decoloración de las hojas.
Las Calatheas necesitan humedad abundante y temperaturas cálidas, estas son las necesidades primordiales para que su desarrollo prospere de manera favorable.
Quincenalmente se le puede añadir un poco de fertilizante al agua de riego, desde el comienzo de la primavera hasta la finalización del verano.
El abono es conveniente que sea para plantas de hoja, cuya formulación está determinada para este tipo de plantas.
No tolera las situaciones de frío, por este motivo en invierno la temperatura no debe bajar de los 13º C.
En ambientes caldeados por la calefacción es imprescindible aportar una dosis extra de humedad a la zona donde se encuentre la planta.
Sólo cuando el ejemplar haya llenado por completo de raíces la maceta hay que cambiarla a una nueva.
La mejor época para hacerlo es a principio de la temporada de crecimiento.
La propagación se lleva a cabo mediante la división de la planta que cuente con espeso follaje, éste es el método más sencillo y realizable por los profanos.
Es importante hacerlo cuando las temperaturas comiencen a ser cálidas de manera estable, entre finales de la primavera y comienzos del verano.
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