Culantrillo - Cabello de Venus
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Este Helecho es con razón unos de las plantas de interior más sensible y cuyas hojas son de las más ligeras de la naturaleza, además de tener un aspecto elegante y muy vaporoso.
Pero puede resultar también muy caprichosa a no ser que se le trate adecuadamente.
Su nombre significa que es impermeable al agua, ya que el agua cae de las hojas de la planta si que sea absorbida.
El Culantrillo presenta un follaje delicado de hojas pequeñas y redondeadas de forma triangular que cuelgan en frondes de tallos fuertes, con aspecto de alambre y color negro amarronado.
Es una planta que se encuentra presente en todo el mundo. Pertenece a la gran familia de las Polypodiaceae.
Son plantas que carecen de flores, fruto y semillas.
Existen muchísimas variedades de Adiantum entre las que elegir, desde plantitas frágiles y diminutas hasta especímenes inmensos y arqueados.
Es vital para el Culantrillo disponer de una elevada humedad, calor, sombra y cierto abrigo ante el frío que no resiste.
La raíz es un tallo carnoso y delgado que se desliza bajo la tierra, llamado rizoma, y que, con los debidos cuidados, desarrolla constantemente nuevos frondes que brotan a partir de pequeñas bolas verdes.
La luz que requiere debe ser moderada y difusa, nunca directa del sol.
El lugar ideal para que prospere es en pequeño invernadero, un jardín húmedo de helechos, o que cuente con un estanque o una fuente ubicados en semi-sombra.
Es una planta tremendamente amante de la humedad y la necesita de forma indispensable, razón por la cual no siempre prospera en interior ya que ninguna habitación cumple con este requisito, salvo el baño.
Lo que hay que buscar es que siempre cuente con la luz necesaria y no se produzcan cambios bruscos de temperatura, cosa bastante habitual en los baños.
Un descuido en la falta de riego del Culantrillo debilitará de tal forma a la planta que será muy difícil que se recupere. Si alguna fronda se seca se debe cortar desde la base, a la altura de la tierra.
Los riegos han de ser frecuentes todo el año, más generosos en periodos de calor, en esta época hay que rociar la planta a diario.
En interior conviene colocar el tiesto sobre un lecho de guijarros húmedos, pero que la base de la maceta no toque el agua.
Es mejor utilizar agua no calcárea y que esté ligeramente atemperada, no le gusta el agua fría.
Entre marzo y septiembre, hay que abonarla cada dos semanas con una pequeñas dosis de fertilizante para plantas de hoja.
Al igual que la mayoría de Helechos esta planta es muy sensible a los humos y a las atmosferas cargadas, que acabarán estropeando sus frondes.
La mosca blanca es un insecto que hace aparición cuando las hojas tienen problemas, es aconsejable atender a las necesidades de humedad de la planta e inspeccionarla regularmente para evitar esa eventualidad.
Cada dos o tres años, en primavera, se dividen los rizomas maduros y se plantan en un sustrato muy poroso en un lugar caliente.
La propagación se consigue de dos formas: mediante la división del cepellón y por esporas, esta última, sólo destinado a expertos cultivadores.
1 comentario:
Hola Carmen, espero que estés bien, el tono de este helecho me encanta.
Un fuerte abrazo.