Centradenia cascade
Este es un género de plantas con una pequeña representación de especies dentro de la voluminosa familia de las Melastomataceae.
La Centradenia es una planta tropical vigorosa, de condición perenne, cuyo origen se encuentra en tierras de Guatemala y México.
Conviene mencionar que resulta muy gratificante su cultivo teniendo en cuenta que necesita de unas atenciones muy elementales que facilita dicha labor.
Cuando se cultiva directamente en suelo, los tallos tienen una tendencia a postrarse sobre el pavimento por lo que puede resultar perfecta como cobertura para determinadas secciones del jardín que tengan una extensión limitada.
También es una buena opción situarla en un tiesto que resulte apropiado para que la planta quede suspendida y pueda exhibir sus largos tallos pendiendo en cascada con natural disposición, dado su naturaleza que se ajusta a ser rastrera o colgante.
El follaje y los tallos disfrutan de un color rojizo con diferentes matices cobrizo, que resaltan de manera sin igual el colorido de su radiante floración.
Sus hojas tienen una forma ovalada acabadas en punta, simples y opuestas, recubiertas de unos pequeños pelillos y con estrías acanaladas bien patentes.
Al nacer las nuevas hojas ya portan una tonalidad bronce que resulta más intenso que el de las hojas viejas que ocasionalmente pueden ser en su totalidad de color verde, cubriéndose de color rojizo en invierno.
Si se observa un crecimiento desigual será beneficioso practicarle un recorte en los extremos de los tallos, de forma que su crecimiento sea más uniforme y compensado.
Es una planta hermosa, adornada con racimos de pequeñas flores de estambres muy largos y compuestas por 4 pétalos de color rosa malva organizadas en panículas terminales.
Las flores se hallan además en otras tonalidades: rosa pálido, púrpura y blancas. Suele comenzar su floración a mediados del otoño y continua floreciendo en invierno siempre que no se la exponga a las heladas.
En climas cálidos puede permanecer al aire libre todo el año. Agradece las posiciones frescas.
La ubicación más acertada en exterior es la que le ofrezca sombra en verano con una sutil dosis de sol matinal o bien donde se encuentre protegida por otras plantas de talla más altas, de forma que la protejan de un sol excesivo.
Sin embargo, en invierno será feliz en emplazamientos soleados.
En interior hay que ofrecerle un lugar bien luminoso que posibilite una floración oportuna.
El riego se debe adecuar a la temperatura imperante, así en verano necesitará de una medida bastante mayor que el resto del año.
En todo caso, nunca hay que dejar que el sustrato permanezca encharcado por largos periodos, lo mejor es humedecerla regularmente y en cantidades comedidas.
Un abono quincenal fomentará un desarrollo armonioso y una floración copiosa, el fertilizante es preferible que sea líquido y que se añada al agua de regar.
Se propaga con bastante rapidez, mediante esquejes de tallos tomados preferiblemente durante la primavera.
También es posible propagarla a través de semillas.
