Sinonimia: Petrea subserrata - Machiguá
Resulta una hermosa enredadera muy ornamental para jardines cálidos donde pueda gozar de temperaturas templadas durante todo el año.
Es nativa del Centro y Sur de América, desde México hasta Paraguay.
Esta especie está incluida en la familia de las Verbenáceas.
Se trata de una enredadera leñosa, de hojas con un carácter semi- persistente, de ramas volubles, serpenteantes, delgadas pero robustas, con la corteza de color marrón pálido o grisáceo.
Tiene un crecimiento ágil y es capaz de alcanzar una excepcional altura, aunque para ello requerirá de una guía y apoyo.
Es perfecta para cubrir estructuras como enrejados o pérgolas.
Las hojas son bastante grandes, opuestas, de forma elíptica terminadas en punta, rígidas, de textura rugosa y ásperas al tacto, los márgenes son irregulares, al inicio se muestran en una tonalidad cobrizo brillante y cuando se desarrollan van evolucionando a un color verde intenso.
Exhibe una espectacular floración que se presenta agrupada en largos racimos colgantes graciosamente arqueados, de hasta 40 cm de longitud, que cobijan por racimo de 15 a 30 flores en forma de estrella.
La peculiar floración, tiene la cualidad de parecer que una flor está dentro de otra al tener cinco sépalos estrechos y alargados de color azul púrpura, que acoge a la pequeña flor compuesta de cinco pétalos aterciopelados, de color morado con un toque blanco en el centro.
Las flores tienen una breve duración, pero los sépalos permanecen en la planta por un largo periodo en el que van perdiendo poco a poco su coloración hasta volverse grisácea.
Florece en primavera; en condiciones favorables puede repetir una nueva temporada de floración a finales del verano, pero ésta será más exigua.
Existe otra variedad más complicada de encontrar con las flores en color blanco puro, que ofrece un llamativo contraste con el follaje. Las flores no poseen ningún tipo de aroma.
Al ser una planta de origen tropical, es muy difícil mantenerla adecuadamente en los jardines de regiones con inviernos rigurosos.
En este caso, es preferible cultivarla en grandes contenedores pero manejables para situarla en un lugar protegido, donde debe permanecer durante todo el periodo invernal.
Prefiere suelos ligeros, ricos, ligeramente ácidos, mantenidos constantemente húmedos, si bien una vez establecida no presenta inconvenientes ante posible sequías pasajeras.
Necesita ubicaciones bien soleadas o la producción de flores será pobre, sin embargo ante veranos tórridos estará mejor en un emplazamiento de semi-sombra.
Origina unos frutos pequeños, tipo drupa y de color marrón oscuro.
Esta planta en general, no tiene problemas importantes de ataques de insectos o enfermedades graves.
Se propaga no sin cierta dificultad mediante esquejes o semillas.