Jacinto del Perú - Esquila portuguesa -
Flor de la corona - flor piña
Scilla maderensis ➤
Son plantas muy apreciadas que se encuentran entre las más cultivadas dentro de las pequeñas bulbosas.
Es un género muy extendido que comprende numerosas especies y variedades, que por lo general, la mayor parte florecen en primavera y otras tantas en otoño.
Existen casi un centenar de especies procedentes muchas de ellas de Asia que están bien difundidas por Europa.
Esta Escilla conocida popularmente por diversos nombres, es originaria de la zona Mediterráne a de España,Italia y Norte de África.
Está integrada dentro de la familia de las Liliáceas. Es óptima para cultivar en suelo de jardín, así como para mantenerla en macetas para la decoración terrazas, incluso en interior si se le facilita las atenciones que necesita.
Dado su hábitat natural se adaptará especialmente bien y sin problemas en los jardines del sur. Es de cultivo fácil y no requiere de atenciones especiales.
Se cultiva y valora como planta ornamental por sus extraordinarias flores de gran belleza y que producen un bello efecto decorativo en el jardín, donde es mejor que esté.
Siempre es bueno que esté al abrigo de otras plantas de follaje ligero pero protector.
Posee alargadas hojas correosas, de hasta 40 cm de longitud, lanceoladas, anchas, carnosas y terminadas en punta combada hacia dentro, son lisas y de color verde profundo.
Respecto a los cuidados que demanda, el Jacinto peruano prefiere estar ubicado en un sitio donde reciba directamente los rayos del sol, aunque tolera bien la semi-sombra.
Pese a que es capaz de acomodarse a lugares sombreados, es preferible ofrecerle emplazamientos soleados para un mejor desarrollo.
Es una planta muy adaptable que aprovecha los suelos ligeros, frescos y bien drenados; el suelo hay que reparar que sea el adecuado, para que no pueda sufrir de encharcamientos que pudran los bulbos.
Los riegos deben ser regulares y adaptados a la climatología sin llegar nunca a ser excesivos.
Desarrolla unas grandes cabezuelas florales de forma piramidal, que están organizadas por pequeñas flores individuales.
La forma de las pequeñas flores semejan diminutas estrellas, compuestas de seis pétalos de color un penetrante azul violeta.
El tallo floral es erecto, de entre 15-40 cm de altura, con un racimo denso, formado por alrededor de hasta 100 flores.
El tiempo de duración de las flores puede extenderse perfectamente varias semanas de forma admirable.
Los bulbos sobreviven en tierra todo el año, pero en climas fríos y húmedos debe protegerse del suelo durante el invierno.
Se conservan bien durante un par de meses en un sitio oscuro y fresco.
En regiones cálidas resistirá bien vivir en el exterior durante gran parte del año, pero necesitará de alguna protección para evitar que las nocivas heladas.
Se multiplica con facilidad por bulbillos, dispuestos en un buen sustrato con abundante humus, donde prosperarán correctamente. La propagación se lleva a cabo a finales del verano.
Se puede reproducir por semillas, pero las plantas obtenidas de semillas pueden requerir demasiado tiempo para florecer.