Lirio araña
El lirio araña es una planta perenne y bulbosa de la familia de las Amarilidáceas, originaria de México y Guatemala.
El lirio araña presenta un bulbo de 7-10 cm de diámetro, hojas ensiformes de 60-70 cm de largo por 3 cm de ancho.
Las flores son grandes, blancas, con un agradable olor a vainilla, sésiles, dispuestas en la extremidad de un escapo áfilo en umbelas 4-8-floras.
El tubo del perigonio es de 15 a 17 cm de largo y los segmentos lineares de unos 10 cm.
Crece bien en terrenos arenosos, perfectamente drenados y en lugares cálidos y soleados.
Necesita abundante riego durante la estación cálida y requiere protección en lugares con inviernos muy fríos.
Puede sobrevivir estando a orillas de canales y ríos.
Comprende aproximadamente 50 especies cuyas características más sobresalientes son, por un lado, la corona estaminal membranácea que une la base de los filamentos de los estambres y por el otro, los tépalos largos y estrechos, que le merecen el calificativo de "lirio araña".
Muchas especies de Hymenocallis son muy raras en la naturaleza, tienen una distribución muy restringida o son endémicas de una localidad concreta como los pantanos de Florida, en Estados Unidos.
Las especies de Hymenocallis se caracterizan por poseer un bulbo subterráneo del cual emerge una roseta de hojas basales y el escapo floral.
El follaje persiste de manera permanente en algunas especies, mientras que en otras es estacional y lo pierden durante el período de sequía.
Presentan de 2 a 16 hojas, las cuales son planas y en general sésiles, aunque algunas especies presentan hojas pecioladas.
Las flores son actinomorfas, hermafroditas, perfumadas, grandes y vistosas, con forma de estrella.
Algunas viven al lado de corrientes de agua o cerca zonas de agua estancada, con tipos de suelo muy diferentes, desde ácidos a calcáreos. Otras son originarias de hábitats áridos.
Finalmente, hay especies que crecen a la sombra y otras a pleno sol.
Por lo tanto, las técnicas y recomendaciones de cultivo son particulares para cada una de las especies del género.
Los estambres presentan los filamentos filiformes, unidos en su base por medio de una amplia cúpula membranosa llamada paraperigonio o corona estaminal.
Los tépalos se extienden desde la base de la corona estaminal y sus porciones libres son reflejas o ascendentes, frecuentemente recurvadas y lineares.
Las flores abren hacia el final de verano, se hallan dispuestas en umbelas protegidas por 2-3 brácteas muy desarrolladas, triangulares, ovadas o lanceoladas reunidas en la extremidad de un escapo áfilo, sólido y comprimido.
Su floración surge en una generosa cantidad que oscila entre 1 a 16 unidades, usualmente sésiles, erectas o levemente divergentes, presentan una bráctea estrechamente lanceolada.
El fruto es una cápsula grande, dehiscente, verde, subglobosa y alongada. Las semillas son grandes, verdes y carnosas.
Existen especies de Hymenocallis que se consideran vulnerables o amenazadas de extinción. Las causas pueden ser la degradación de su hábitat natural o una distribución muy restringida.