: Margarita de los prados - Margarita menor - Bellorita
Aún siendo una planta perenne se la trata habitualmente como anual, dado que las floraciones posteriores son muy pobres.
Uno de los problemas que puede presentar es su pobre resistencia al frío.
Es más conocida como Margarita de los prados por ser éste su hábitat natural.
Por lo general la forma que está presente en los jardines es la variedad gigante, de flor doble, resulta muy atractiva y constituye un toque de hermoso colorido.
Además de ser muy apreciada en jardinería, lo es también gracias a sus propiedades terapéuticas.
Sus flores aunque no superan los 20cm de altura son muy vistosas, tanto en su forma sencilla o compuesta.
Éstas aparecen desde la primavera (generalmente a partir de marzo) hasta mediados del verano.
Esta alegre planta nos puede proporcionar flores durante prácticamente todo el año dependiendo en la época que se siembre.
Si se hace de forma escalonada podremos gozar de una prolongada floración.
Es necesario ir suprimiendo las flores a medida que se van secando, esto origina nuevas flores.
Estas pequeñas plantas se adaptan bien al cultivo en jardineras, así como para utilizarlas para relleno.
No obstante alcanzan su máximo atractivo cuando son cultivadas en pequeñas macetas anchas y planas, donde se encuentren apretadas, de forma que queden muy tupidas.
No es una planta demasiado exigente con el emplazamiento ya que soporta tanto la exposición a pleno sol como la semi-sombra.
Le gusta los terrenos fértiles y los riegos abundantes en periodos de calor, pero siempre hay que evitarle el exceso de agua.
La Margarita de los prados no soporta las heladas, pero las temperaturas frescas favorece su floración.
La reproducción se consigue mediante semillas sembradas principalmente entre junio y julio, o bien por división del cepellón.
Cuando se cultiva en jardín las semillas pueden auto diseminarse espontáneamente.
Aplicaciones terapéuticas de la Bellis:
Las cabezuelas florales se recolectan y secan para aplicaciones y remedio de algunas enfermedades ya que contienen taninos, aceites esenciales y ácidos orgánicos.
Eso hace que se les otorguen diferentes propiedades: expectorantes, diuréticas, cicatrizantes, controlar la presión arterial, etc.
La infusión de hojas y flores se considera diurética y depurativa; se emplea también tópicamente para el acné y otras afecciones de la piel.
Las hojas jóvenes son comestibles, tanto crudas como cocidas.
Uno de los problemas que puede presentar es su pobre resistencia al frío.
Es más conocida como Margarita de los prados por ser éste su hábitat natural.
Por lo general la forma que está presente en los jardines es la variedad gigante, de flor doble, resulta muy atractiva y constituye un toque de hermoso colorido.
Además de ser muy apreciada en jardinería, lo es también gracias a sus propiedades terapéuticas.
Sus flores aunque no superan los 20cm de altura son muy vistosas, tanto en su forma sencilla o compuesta.
Éstas aparecen desde la primavera (generalmente a partir de marzo) hasta mediados del verano.
Esta alegre planta nos puede proporcionar flores durante prácticamente todo el año dependiendo en la época que se siembre.
Si se hace de forma escalonada podremos gozar de una prolongada floración.
Es necesario ir suprimiendo las flores a medida que se van secando, esto origina nuevas flores.
Estas pequeñas plantas se adaptan bien al cultivo en jardineras, así como para utilizarlas para relleno.
No obstante alcanzan su máximo atractivo cuando son cultivadas en pequeñas macetas anchas y planas, donde se encuentren apretadas, de forma que queden muy tupidas.
No es una planta demasiado exigente con el emplazamiento ya que soporta tanto la exposición a pleno sol como la semi-sombra.
Le gusta los terrenos fértiles y los riegos abundantes en periodos de calor, pero siempre hay que evitarle el exceso de agua.
La Margarita de los prados no soporta las heladas, pero las temperaturas frescas favorece su floración.
La reproducción se consigue mediante semillas sembradas principalmente entre junio y julio, o bien por división del cepellón.
Cuando se cultiva en jardín las semillas pueden auto diseminarse espontáneamente.
Aplicaciones terapéuticas de la Bellis:
Las cabezuelas florales se recolectan y secan para aplicaciones y remedio de algunas enfermedades ya que contienen taninos, aceites esenciales y ácidos orgánicos.
Eso hace que se les otorguen diferentes propiedades: expectorantes, diuréticas, cicatrizantes, controlar la presión arterial, etc.
La infusión de hojas y flores se considera diurética y depurativa; se emplea también tópicamente para el acné y otras afecciones de la piel.
Las hojas jóvenes son comestibles, tanto crudas como cocidas.