INICIO         FICHAS DE PLANTAS   / BULBOSAS    /    CONSEJOS   /    CUIDADOS   /    AROMÁTICAS   /    PLAGAS    /    APUNTES /





Allamanda cathartica


Jazmín de Cuba



Cualidad: La Allamanda es una preciosa planta trepadora de flores doradas, fuerte y robusta, procedente de la zona tropical Americana.

Grupo: Pertenece a la familia Apocynaceae y tiene un carácter perenne.

Otra especie: Allamanda violacea

Hojas: Posee largas hojas estrechas de forma oval, lustrosas y de color verde oscuro.

Flor: Desde julio hasta septiembre, las grandes y brillantes flores amarillo doradas con forma de embudo, se abren en racimos en los extremos de las ramas.

Desarrollo: En los climas cálidos florecen casi todo el año. La Allamanda es muy vigorosa y de rápido crecimiento, puede alcanzar hasta tres metros de altura en las condiciones correctas.

Guía: Al ser una trepadora necesitará un soporte para crecer erguida, se puede poner contra una pared o bien en alguna estructura indicada para enredaderas.

Luz: Se debe proporcionar a esta planta muchísima claridad. Sin embargo, si el sol es demasiado directo y fuerte las hojas se marchitan.
De modo que en la época más calurosa los ejemplares jóvenes se deben colocar bajo una ligera sombra.

Humedad: El riego se tiene que hacer regularmente durante todo el año para mantener la tierra constantemente húmeda; cuanto mayor sea la planta, más agua necesitará en verano, pero sin proporcionarle tanta como que para el compost permanezca empapado entre riego y riego.

Importante : A esta planta hay que rociarla con agua al menos una vez al día durante la época de más calor, para crear un ambiente de gran humedad, sin ella, la planta no florecerá.

Durante el verano prefiere tener una temperatura entre 21 y 27ºC siendo el mínimo de 15º C. para que se desarrolle con normalidad

Abono: A partir de septiembre hay que dejar de abonarla porque la planta necesita un periodo de descanso.

Durante el otoño y el invierno (en el hemisferio norte) lo más importante que se puede hacer por la Allamanda es mantenerla a una temperatura que no baje de los 15 º C.

Poda: Al finalizar el invierno es bueno realizar una poda ligera, así como una limpieza para descartar todo el material en mal seco y en mal estado.


Propagar: En marzo o abril, se pueden hacer esquejes de las puntas de las ramas que hayan nacido durante el año anterior.

Se puede utilizar perfectamente los retoños que se hayan cortado durante la poda.

Hay que tomar un fragmento de la punta de los tallos de unos 10 centímetros de largo, luego hay que sumergir los extremos en hormonas de enraizamiento para facilitar la labor, y se plantan en un compost de turba y arena a partes iguales.

Los esquejes: se tienen que mantener a una temperatura cálida lo más constante posible, emitirán raíces con bastante rapidez.

Hay que tener la precaución al cortar las ramas y hojas de esta planta, es importante lavar bien manos y herramientas porque el líquido que emana es tóxico




  Plantas para rincones difíciles -         Cuidados cotidianos -