Microsorum musifolium 'Crocodyllus'
Polypodium musifolium - Microsorum 'crocodyllus'
Helecho Cocodrilo - Microsorum cocodrilo
Esta Microsorum está incluida en el género que pertenece a la familia de los helechos denominada Polypodiaceae.
Esta planta de carácter perenne y curiosas hojas resulta excelente como planta de interior o planta de galería.
Es perfecta para desarrollarse en jardines húmedos y no soleados, en los que en invierno no exista el peligro de heladas.
En su hábitat natural prospera como una epífita, esta excepcional circunstancia puede ayudar a quien pretenda crear o tenga un terrario húmedo y la cultive sobre una rama o el hueco de un tronco.
En un espacio como el referido sería el más cercano a su propio entorno.
Ahora bien, no hay problema en emplazarla en una situación de interior, solo que habrá que contemplar unos simples requisitos: abundante claridad sin sol directo y un ambiente húmedo.
Lo extraordinario de esta planta está en la superficie de sus hojas, compuesta por finas líneas de dibujos semejantes a escamas, de ahí la analogía con la piel de un cocodrilo.
Las lustrosas hojas de textura ceros surgen de una macolla, naciendo en disposición circular, son muy alargadas alcanzando el metro de longitud cuando es adulta.
Son anchas, acabadas en punta, ligeramente curvadas hacia adentro, con bordes ampliamente ondulados y el nervio central bien destacado.
Necesita tener el sustrato siempre con una humedad moderada pero continua, la falta de humedad hace que los bordes de las hojas se tornen secas o amarronadas.
Es en época de calor cuando requiere de riegos más abundantes y una buena dosis de humedad ambiental empleando un pulverizador o un humidificador.
Para humedecer el follaje es preferible utilizar agua sin presencia de cal que acaba por dejar manchas blanquecinas muy desagradables.
También es bueno que el agua no esté demasiado fría, es preferible que esté ligeramente atemperada, o al menos a temperatura ambiente.
Con el tiempo la planta adquirirá un buen tamaño y sus hojas necesitarán de un sitio bien espacioso para mantener sus hojas cómodamente abiertas, es entonces cuando habrá que plantearse llevarla al jardín.
Entre la primavera y verano es beneficioso abonarla quincenalmente, un fertilizante para plantas verdes añadido al agua de riego será el mejor.
Como sucede con todos los helechos, esta especie tampoco soporta el frío invernal, de modo que nunca hay que dejarla a la intemperie si puede producirse una bajada de temperatura.
Mantener las hojas limpias ayudará a la planta a lucir un hermoso brillo y la protegerá ante posible plagas.
Se limpia simplemente con un algodón humedecido en agua con unas gotas de jabón, hay que limpiar ambas caras de las hojas.
No requiere de ningún tipo de poda, simplemente habrá que cortar a ras de la base cualquier hoja que amarillee porque sea muy vieja.
La división de la mata es la única fórmula doméstica para propagar este helecho.
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